Dios es santo

Con esta publicación concluimos con la serie "Conociendo a Dios a través de las escrituras", te agradezco el haberme acompañado durante estas semanas, también quiero invitarte para que estés pendiente de nuevo contenido que estoy preparando para ti.

Le agradezco a Dios por la oportunidad que me ha dado de poder compartir contigo que me lees periodicamente, ya que para mí ha sido enriquecedor el tiempo que me he tomado estudiando la Biblia para preparar estas publicaciones, el 2016 fue un año de mucho aprendizaje, por los eventos vividos como familia, y por lo aprendido en mis tiempos personales de estudio bíblico y oración. Espero que este 2017 del cual ya vivimos 20 días sea de mucha bendición tanto para tí como para mí, como también contar con tu apoyo leyendo y compartiendo con otros estas publicaciones que tienen como único objetivo el de edificar, acompañar, servir de aliento y motivación. 

¿Quién no te temerá, Señor,

y glorificará tu nombre?,

pues solo tú eres santo;

por lo cual todas las naciones

vendrán y te adorarán,

porque tus juicios se han manifestado.

Apocalipsis 15:4

En apocalipsis 15, encontramos la narración de una visión, la visión de Juan en la cual siete ángeles derraman sobre el mundo las copas llenas del vino de la ira de Dios.

Según Matthew Henry, el versículo cuatro nos habla del cántico que los mártires entonan acompañados de sus arpas. En él se enaltece el poder, la justicia y la rectitud de los caminos de Dios y su santidad la cual no tiene comparación, a la vez que nos muestra una visión futura de la universalidad del culto que se le tributará en el milenio. La conducta de Dios (sus caminos), es justa por su perfecta rectitud, de él también se dice que es fiel (caminos verdaderos) para cumplir sus promesas

¿Habrá alguien en la tierra que no tema al Señor, ni glorifique su nombre? Solo Jehová es santo, esa expresión, “solo tú eres santo”, enuncia el carácter esencialmente santo de su persona y de todo lo que Dios emana: Propósitos, actividades, promesas, preceptos, etc. Indica también que solamente Dios tiene en sí esencialmente y como en su fuente, la santidad. Sus juicios se han manifestado. 

Todas las naciones vendrán y lo adorarán.  En el Salmo 86:9 encontramos que también se hace mención  a este hecho

La Escritura demanda de cada uno de nosotros que tengamos fe en la santidad de Dios. Debemos temer a Dios y glorificar su nombre. Adorarle como se merece.

Dios es santo, así que cualquier cosa que planee o disponga para tu vida estará en armonía con su santidad, su voluntad es santa, su amor hacia nosotros es santo, sus propósitos también lo son. Puede que en un momento de angustia o sufrimiento lleguemos a pensar que Dios nos ha mentido y que no es tan bueno como creemos, pero esos pensamientos atentan contra el carácter mismo de Dios, porque en su palabra vemos que constantemente se nos recuerda que los propósitos de Dios están acordes a lo que él es.

Jehová el santo es Rey de las naciones, (Jeremías 10:7) y a él le debemos nuestro temor porque Él es dueño de toda sabiduría, no hay otro rey más sabio, no hay ningún rey en todo el mundo que sea parecido a Él. Necesitas confiar en la sabiduría de Dios, necesitas confiar en que él es Rey, que sigue gobernando, y no hay nadie capaz de hacerlo mejor que él, necesitas creer que él tiene el control del mundo y tu vida. Dios es santo, su amor por ti es santo.