Job 32: Un joven impetuoso




2 Entonces Eliú hijo de Baraquel, el buzita, de la familia de Ram, se encendió en ira contra Job. Se encendió en ira por cuanto él se hacía justo a sí mismo más que a Dios.
3 Igualmente se encendió en ira contra sus tres amigos, porque aunque habían condenado a Job, no sabían responderle.
Job 32:2-3

Si  me has estado acompañando regularmente en el estudio del libro de Job habrás notado que en esta historia encontramos muchos altos y bajos; particularmente si leíste la publicación anterior, al igual que yo y todos los que hemos leído con un poco más de atención los sucesos del capítulo anterior, probablemente habrás percibido que la historia llegó a un punto en el que Job parecía estar en la cima de una gran montaña, que ya no cabía más que la intervención de Dios en el relato, pero después de esa enorme “encumbrada”, lo que sigue está lejos de ser la culminación de la historia de triunfo de este héroe de la fe, más bien es un paréntesis en el que aparece un personaje inesperado.


Encontramos la intervención de Eliú, un joven del que no se nos había mencionado en los capítulos anteriores, un personaje sorpresivo que había tomado el papel de observador pasivo de las escenas que se habían estado suscitando en la discusión que estaba teniendo lugar entre Job y sus amigos. Pero ¿Qué sabemos de Eliú? ¿Quién es? ¿Qué papel toma en esta historia? ¿Cuál es el propósito de su larga intervención? ¿De dónde proviene? Y ¿Por qué no se nos había mencionado antes? ¿Cuál era el objetivo del escritor de mantener en secreto la presencia de este joven en los diferentes escenarios que se nos han ido presentando?


Lo que sabemos del origen de este personaje es lo que se dice en los primeros versículos de este capítulo. A diferencia de Job y sus tres amigos, de Eliú podemos encontrar una genealogía, en la que se nos dice primero el significado de su nombre que es “Mi Dios es Él”, y de acuerdo a comentaristas, al parecer es un nombre muy utilizado en el antiguo Israel, en la época de los jueces encontramos varías referencias de personajes que tenían el mismo nombre (1Sam. 1:1, 1Cr. 12:4; 26:7; 27:18).


Se nos menciona también el nombre de su padre Baraquel, que significa “Bendito Dios”, y no se encuentra en ninguna parte del Antiguo Testamento (A.T).  Ralph L. Smith menciona que aparece en algunos documentos de Akkad y se creía que era descendiente de Buz, quien era hijo segundo de Nacor (Gen. 22:21) por lo que existe la probabilidad de que fuera arameo  o árabe (Gen. 22:20; Jer.25:23). Pero su familia, Ram, generalmente es relacionada con la tribu de Judá (Ruth 4:19; 1Cr. 2:9; 25:27).
En la paráfrasis Caldea se lee de la familia de Abram, por lo que algunos suponen que Ram es el mismo que después llegó a ser Abraham, pero esta es una suposición de acuerdo a Matthew Henry. Lo que sí resulta interesante es la molestia del autor por especificar estos detalles de este joven, detalles que se omitieron en los otros personajes. Esto es lo que dio pie, a que muchos escritores pensaran que en realidad Eliud no fuera un personaje que estuviera incluido en los escritos originales, sino que fue añadido después, pero de acuerdo a Ralph L. Smith, esto es algo que no debería ser causa de controversia, ¿por qué ha de ser importante que no se hablara de él desde el principio? ¿No podía ser parte del drama de la historia? Acordémonos que es un poema.


Mejor es concentrarse en lo que podemos aprender del personaje, ¿Qué más se nos dice de él? Era joven, pero no cualquier joven, a éste joven le interesaba los problemas teológicos y prácticos de la fe, y perdía la paciencia al ver como manejaban la teología los mayores. 



En los primeros cinco versos, hace referencia a que la ira se apoderó de él, ira ocasionada por la indignación que le provocaba que Job “se justificara a sí mismo” más que a Dios (v.2). Pero la indignación de Eliú no solamente es hacia Job, también es contra sus amigos (v.3). Pero probablemente en parte se debe a su juventud y falta de sabiduría.


Para algunos comentaristas  “Eliú es un personaje arrogante que mezcla la verdad con la vanidad sin aportar nada realmente bueno” J. M. Martínez.
Aun así pienso que los motivos de Eliú eran buenos, pero su discurso estaba mal aplicado, él pretendía lograr lo que los otros no pudieron pero lo hace tan desastrosamente mal, que Job ni siquiera se molesta en contestar.


¿Qué podemos aprender de los errores de Eliú?

1-    Por muy inteligentes, conocedores de la Palabra, o bien instruidos que nos creamos; nunca es bueno menospreciar el pensamiento de otros, especialmente de los mayores. No sabemos lo que podemos dejar de aprender de ellos si esto hacemos.

2-    No es bueno discutir desde el ardor de nuestras emociones y no vale la pena discutir asuntos tan trascendentales con alguien que habla desde su enojo. En Facebook un día vi una publicación en la que decía que las personas enojadas tomaban las mejores decisiones, no es cierto, las más grandes tonterías se cometen cuando actuamos o hablamos desde nuestro enojo.

3-    Dios no necesita que lo defendamos, Él puede solo, siempre lo ha hecho. Lo que espera de nosotros es que seamos sus fieles testigos.

4-    Nuestro discurso debe tener fundamento, hablar desde la emoción nos aleja del verdadero fundamento y esta es la Palabra de Dios.

Lo positivo del personaje, es la convicción sincera que tenía, y el vehemente respeto a la soberanía de Dios.

Comentarios

  1. Pues con todo respeto a su escritura, pero no estoy de acuerdo con usted, con respecto a Eliu porque Dios no lo reprende como lo hizo con los tres amigos y yo lo veo de otro ángulo el que no respondiera Job ninguna palabra, y yo entiendo que eso fue porque no tuvo como defenderse de Eliu...y también porque terminan sus palabras e inmediatamente entra Dios al escenario y dice palabras que Eliu uso con Job. Eliu habló al respecto de un torbellino y Dios desde un torbellino le habla a Job para reprenderlo y le habla de la tierra, del mar, de la lluvia, de las nubes, también; de el hielo, los truenos, los animales, el viento, los impios y mas cosas que Eliu le dijo a Job cuando lo reprendió para que reconociera que se estaba equivocando en sus palabras hacia Dios. Lo siento pero yo no creo que Eliu haya estado hablando con arrogancia ni soberbia porque Dios lo hubiera reprendido también como a los 3 y NO lo hizo. Ne gustaría saber quien fue Eliu��... Pero ya estando en la presencia de Dios lo sabremos, y tal vez no esté en lo correcto yo., puede ser. Dios le bendiga

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    1. Totalmente de acuerdo bendiciones

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    2. Airaos mas no pequeis , concuerdo con ambos comentarios ,

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  2. Yo creo que eliu no cometió errores como dice el señor escritor de este escrito sobre quien era eliy y concuerdo con el señor del comentario anterior de que si hubiese dicho algo mal tambirn hubiera Sido reprendido por Dios pero esa es mi opinión los respeto y si estoy equivocado solo Dios lo sabe y acepto cualquier correcion

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